Al salir de la Educación Media, como recién egresada o egresado te enfrentas a la difícil decisión de elegir la carrera que definirá el resto de tu vida. Sin embargo, es normal que muchas veces se tomen decisiones que luego terminen siendo equivocadas, considerando que a veces la inmadurez o la falta de apoyo te hayan podido jugar una mala pasada. 

Por lo mismo, el cambio de carrera no es algo raro en los y las estudiantes. 

Si has pasado por esto, no debes sentirte mal. Si bien hay quienes ya tienen definido qué estudiar incluso desde una temprana edad, para muchos y muchas no está todo claro. La presión por dar el siguiente paso hacia los estudios superiores puede llevarte a escoger carreras que con el tiempo no llenen del todo tus expectativas. 

Consejos para dar el paso y cambiar de carrera

Es posible que tú, quien está leyendo, esté pasando por esa disyuntiva y se pregunte cómo cambiar de carrera, con la seguridad de estar tomando la decisión correcta. 

A continuación, algunos consejos que te serán de gran ayuda para definir tus próximos pasos, tanto en el aspecto emocional como en el práctico y burocrático: 

1. Sé sincero contigo mismo

Sincérate sobre los verdaderos motivos para cambiarse de carrera. ¿Hubo tal vez presión de parte de tu familia para estudiar un plan formativo en específico? Si es así, y realmente sientes que lo tuyo va por otro camino, sé honesto con ellos. 

Lo mismo pasa si la decisión fue tuya y realmente en el proceso te diste cuenta de que puedes sacar mejor provecho de tus talentos y vocación en otra carrera. 

Recuerda que la comunicación es esencial, pero aún más importante es la sinceridad contigo misma o mismo y lo que esperas hacer de tu vida futura. 

2. Busca orientación profesional

Si no estás bien segura/o de lo que te pasa, pero sientes que atraviesas una crisis vocacional, pide ayuda. 

Un o una psicóloga podrá ayudarte a ahondar en los motivos para cambiarse de carrera, dilucidar cuál es el problema y cómo resolverlo. Es posible que no se trate de falta de vocación o talento, que simplemente pueda deberse a inseguridad o falta de autoestima, lo que te impide sentirte capaz de terminar tus estudios. 

Pedir ayuda profesional no es un signo de debilidad, por el contrario, demuestra que eres una persona que desea enfrentar sus problemas y solucionarlos. 

3. No te compares

La comparación con otros, que parecieran tener todo resuelto, solo te hará daño. 

Cada persona es un mundo y cada una va a su ritmo. Permítete tener dudas, no te castigues. En cambio, investiga cuáles son tus posibilidades, ahonda en tus talentos, piensa en lo que te hace feliz y dirige tus energías hacia ese destino. 

4. Habla con tu Director/a de Escuela o Jefa/e de Carrera

Si ya has tomado la decisión de cambio de carrera, acude tu Director/a de Escuela o Jefa/e de Carrera y plantéale tus inquietudes, para que te oriente en el proceso sobre cómo cambiar de carrera, es decir, si existe convalidación, validación u homologación de ramos, en caso de que corresponda, y otros temas que puedan ser de tu interés. 

5. Revisa las alternativas que existen para tu cambio

Revisa las carreras disponibles del área de estudio de tu interés y si te puedes cambiar dentro de la misma institución (transferencia) o a otra (traslado).

Si posees gratuidad, no te preocupes porque, si es tu primer cambio de carrera, no la perderás si cumples con los requisitos. 

Te invitamos al proceso de admisión de la UTEM, para que revises en detalle las carreras disponibles, sus correspondientes mallas curriculares, perfil de egreso, empleabilidad y más. 

La idea es que tomes la decisión de estudiar lo más informada/o posible y de acuerdo con tus cualidades y preferencias.