La humanidad viene aprovechando los beneficios de las algas desde hace siglos, principalmente como alimento o medicina. Sin embargo, el desarrollo de la biotecnología ha llevado esta explotación a otro nivel y hoy en día es posible utilizar eco-algas en el cuidado del medio ambiente. Gracias a sus capacidades biológicas, pueden usarse en múltiples aplicaciones ecológicas, entre las cuales destaca la descontaminación de aguas residuales. 

En 2014, ya habían estudios para transformar aguas negras en aguas algo más limpias y en abono utilizable en la agricultura. En la actualidad, se han logrado diferentes avances y prototipos, basados en microalgas especiales, que permiten tratar los residuos líquidos de diferentes industrias. De esa forma, eliminas de forma natural muchos compuestos y microorganismos que son peligrosos para la salud humana.  

¿Cómo ayudan las eco-algas a eliminar agentes contaminantes del agua?

Mediante la fotosíntesis, algunas microalgas logran convertir el dióxido de carbono en biomasa valiosa, como abonos y biodiésel, una fuente de energía renovable mucho más limpia que los combustibles fósiles. Algunas algas útiles para esto son:

• Spirulina
• Chlorella
• Scenedesmus

Más importante todavía, en lo que respecta a tratamientos de agua, son capaces de eliminar microrganismos y compuestos dañinos como nitrógeno, fósforo y metales pesados, pues se alimentan de ellos. 

Además, hay casos en los que estas algas pueden ser mejoradas genéticamente para potenciar su rendimiento en aplicaciones específicas. Aquí tienes un ejemplo notable:

• Sector ganadero: algunos estudios han aplicado una domesticación gradual y mutagénesis UV para mejorar su adaptabilidad en el tratamiento de aguas residuales del sector ganadero, específicamente de digestatos de diferentes especies (cerdos, ganado vacuno y aves de corral).

Al final, termina siendo una solución mucho más barata y ambientalmente favorable que otras alternativas de tratamiento tradicionales, como la precipitación o la electrodiálisis, y puedes combinarla con bacterias que limpian el agua mediante la descomposición de la materia orgánica. Al final, tendrás un sistema de descontaminación biotecnológico muy eficiente y sostenible. 

El impacto de las ciencias químicas para el cuidado del medio ambiente

La posibilidad de limpiar el agua que desechamos de diferentes actividades humanas tiene un impacto muy positivo en el cuidado del medio ambiente. En un contexto de calentamiento global acelerado y aumento de la población, la creciente escasez hídrica se ha convertido en un problema alarmante. 

Esto resulta particularmente relevante en Chile donde, para el año 2022, más del 50% de las comunas del país se encontraban en situación de escasez hídrica, según la Dirección General de Aguas. Este problema tiene diversas repercusiones, tanto para la población nacional como para el equilibrio de los ecosistemas.

Si el nitrógeno, el fósforo y demás agentes contaminantes del agua llegan a los grandes cursos de agua, se incrementa la probabilidad eutrofización y ocurre un aumento excesivo de microorganismos acuáticos, generando:  

• Descompensación en el ecosistema marino, que pone en riesgo la vida de muchas plantas y animales
• Una carga de patógenos en el agua, que la vuelven riesgosa tanto para el consumo humano como para su uso en la agricultura.

En este contexto, las y los profesionales de ciencias químicas pueden protagonizar una revolución para el cuidado del agua. La integración de microalgas y bacterias que limpian el agua en los sistemas de tratamiento, es una alternativa natural a los químicos potencialmente dañinos para el medio ambiente. 

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