Cursar una carrera es un desafío que exige un gran compromiso físico, emocional y mental, y que puede resultar muy desgastante. Por lo mismo, aspectos como los hábitos de sueño, la actividad física o la alimentación pueden ser más determinantes de lo que se piensa para el éxito y bienestar de estudiantes universitarios / as.

Sin embargo, los intensos horarios de estudio y los presupuestos limitados pueden producir malos hábitos de alimentación en estudiantes universitarios / as. De hecho, según datos de la OMS, el 84% de los y las jóvenes en Latinoamérica no cumple con sus requerimientos nutricionales.

Entender en detalle por qué es importante la alimentación para estudiantes universitarios / as es fundamental para descubrir cómo favorecer mejores hábitos y potenciar mayor concentración, energía y una mejor calidad de vida. 

La salud y la alimentación

Lo que comes tiene una incidencia directa en tu bienestar general. Ingerir alimentos en horarios adecuados y tener una dieta balanceada con los nutrientes y vitaminas que necesitas, contribuye a que tus defensas sean fuertes. De esta forma, te proteges mejor de enfermedades, bajas de ánimo o falta de energía.

En realidad, este es tan solo uno de los cientos de beneficios que una alimentación balanceada entrega a tu bienestar. Igualmente, puede ayudarte a:

• Mantener una piel sana
• Favorecer tu buen ánimo y buen humor
• Prolongar tu vida
• Potenciar tus capacidades cognitivas
• Prevenir enfermedades no transmisibles, como las cardiopatías o el cáncer
• Evitar el deterioro de la vista

Todos estos aspectos resultarán determinantes para enfrentar de la mejor manera los desafíos que la vida universitaria te presenta.

Igualmente, considera que existen algunos alimentos que pueden favorecer especialmente tu habilidades de estudio. Por ejemplo, la palta, las nueces y los arándanos ayudan a la memoria y la concentración, pues proporcionan una mejor oxigenación al cerebro y elevan los niveles de energía.

Ventajas y relación entre alimentación y estudio

Cuando el cerebro se oxigena de buena manera, permite a las personas optimizar sus habilidades cognitivas, favoreciendo la memoria, la concentración y el rendimiento general. Así, les permite sacar su máximo potencial durante largas jornadas académicas, entender en profundidad temas complejos, estimular el pensamiento crítico, participar y realizar las tareas con calidad y creatividad.

Todas estas obligaciones, además de exigir el uso de tus capacidades cognitivas, requieren de un gran gasto de energía física. En ese sentido, una alimentación rica en carbohidratos, grasas de calidad, proteínas y macronutrientes jugará un importante papel para evitar la fatiga y sostenerte en jornadas exigentes.

Alimentos que no pueden faltar entre estudiantes de educación superior

Ahora que conoces la importancia de tu alimentación para el estudio, tómate el tiempo para evaluar cómo optimizar cada una de tus comidas. Aunque las necesidades alimentarias varían de persona en persona, asegúrate de integrar algunos de estos alimentos en tus desayunos, almuerzos, cenas y colaciones:

• Huevos: favorecen fortalecimiento de la memoria.
• Legumbres: permiten la formación de neurotransmisores y te entregan proteínas.
• Lácteos como quesos, yogur y leche: estos elevan tu capacidad de aprendizaje y reducen la fatiga.
• Frutos secos: son ideales para mejorar el desempeño de las neuronas y propiciar una mejor concentración.
• Frutas y verduras variadas: estas te ayudan a aumentar las defensas y mejorar la memoria
• Pescado: gracias a sus niveles de Omega-3, eleva tu función cerebral.

De igual manera, es relevante destacar que hay que evitar en lo posible el alto consumo de grasas saturadas y azúcares, que se asocian con la prevalencia de diferentes enfermedades. Considera también que las azúcares procesadas producen rápidos picos de energía, seguidos de largas bajas de ánimo.

Complementando los buenos hábitos de alimentación en estudiantes universitarios / as

Aunque es cierto que es importante la alimentación para estudiantes universitarios / as, también hay otros aspectos igualmente relevantes que debes considerar como factores complementarios:

• Una adecuada hidratación: esta facilita la circulación de sangre en el cerebro, fortaleciendo también las capacidades cognitivas. Se recomienda que las mujeres ingieran al día 2,7 litros de agua y los hombres 3,7 litros, como cantidades óptimas.
• Buenos hábitos de sueño: las personas universitarias deben dormir 7 horas o más para tener un buen desempeño académico y rendir mejor a lo largo del día.
• Actividad física: el ejercicio es benéfico, no solamente para balancear la alimentación y evitar el sobrepeso, sino también para potenciar los niveles de energía, la concentración y reducir el estrés.

Mejores hábitos, mejor estudio, mejor vida

Alimentación y estudio van de la mano. Si ya estás cursando una carrera o tienes planes de hacerte parte de la Admisión 2025 en UTEM, asegúrate de cuidar todos los aspectos de tu salud para rendir de mejor manera, aumentar tu calidad de vida y sacar a relucir tu máximo potencial.