Nicolás Duarte es uno de los estudiantes que transitó por esta escuela. Titulado de la carrera de Diseño Industrial, ha logrado desarrollarse profesionalmente de manera satisfactoria y hoy hace una revisión y evaluación de su paso por la UTEM.

¿Cómo fue tu paso en la Universidad? ¿Qué destacarías?

Mi paso por la universidad fue bueno, tranquilo. Conocí gente hermosa, profesores hermosos, profesionales muy buenos. Considero que la facultad de diseño es súper buena, puedo destacar la infraestructura de la escuela, que está bien preparada para formar diseñadores que se planteen problemáticas actuales.

¿Te sentiste apoyado por la universidad durante tus estudios?

Sí, en términos académicos y de formación siempre tuve respuestas, siempre tuve un apoyo y eso me hacía sentir que valía la pena seguir en la universidad, y en específico en la carrera. Hoy en día me siento orgulloso de decir que vengo de la Escuela de Diseño de la UTEM, y eso yo creo que va en el hecho de que me sentí muy comprendido. Había en la comunidad universitaria una forma de decir “hagamos escuela, hagamos universidad”.

¿Cómo ha sido tu desarrollo profesional?

He tenido un buen desarrollo. Actualmente soy Asistente del Coordinador del FabLab UC (Laboratorio de fabricación). Acá mis funciones son bastante variadas, estoy encargado de gestionar y mantener el Taller del FabLab Operativo, veo difusión, y además recibo y superviso los proyectos del laboratorio. Soy parte del equipo que hace capacitaciones a quienes realizan talleres, y también soy parte del equipo que prepara las escuelas de verano y de invierno. Soy mentor en el equipo de robótica juvenil “Los Chilis”, que participa en un campeonato que se llama FRC (FIRST Robotics Competition) y que es un torneo donde al equipo se le pone un desafío todos los años y la idea es que el robot los supere.

¿Cómo fue tu ingreso al mundo laboral? ¿Te sentía con las competencias necesarias?

Es difícil, pero yo diría que sí. En todas las funciones y desafíos que me ponían laboralmente me sentía preparado, con herramientas para hacerlo bien. No noté deficiencias, la UTEM me preparó súper bien, incluso para poder aprender metodológicamente y poder autocapacitarme para no quedarme atrás frente a los desafíos que me ponía la industria.

¿Qué te ayudó a enfrentar los desafíos universitarios?

Ponerme metas y objetivos y cumplirlos tanto a corto como largo plazo. Ir cumpliéndolos uno a uno, de poco, no correr a tontas ni a locas. Eso ayuda a no frustrarse tan rápido.

¿Qué recomiendas a quienes van a empezar esta etapa?

Disfrutar al 100% a tus compañeros, a tus profesores, tu escuela, y también a la universidad, en todos los sentidos, tanto educacional como políticamente. En el caso de la UTEM, el hecho de que sea una universidad estatal te hace tener una mirada súper distinta a otras instituciones, y eso es clave, te pone en un punto de vista diferente. Personalmente yo logré disfrutar lo bueno y lo malo, saliendo de la universidad me quedé con la sensación de que lo pase bien.

¿Qué diferencia a la UTEM de las otras universidades?

Creo que la UTEM es una universidad que ejemplifica súper bien la realidad chilena, sobre todo del perfil de clase media real, de la persona que viene de fuera de Santiago, o la que se demora un hora y media en metro para llegar a estudiar. Lo que más valoro es que es una universidad estatal y se nota que se trabaja. En específico creo que la Escuela y Carrera de Diseño te hace sentir eso, que somos escuela y tenemos que trabajar todos para que sea la mejor escuela de diseño. Siento que puedo decir que vengo de la UTEM y puedo ser mucho mejor de otros que han salido de otras universidades, se puede, solo es cosa de demostrarlo y confiar en ti mismo.